Cada vez son más las organizaciones que buscan tener un impacto positivo en el mundo, construir un liderazgo a largo plazo, crecer, estabilizarse, tener un propósito y mantenerlo, mientras siguen siendo rentables. El desafío es mantener el equilibrio entre el crecimiento económico, la protección del medio ambiente y el bienestar social. En otras palabras, satisfacer las necesidades del presente sin comprometer la capacidad de las futuras generaciones para satisfacer sus propias necesidades.
Sobre estos temas, Ether Zulli conversó en el podcast “Construyendo el Futuro”, un espacio pensado por Grupo Mirgor para construir diálogo sobre distintos aspectos que hacen a su negocio con referentes y especialistas sobre los temas en los que se enfoca la actividad de la compañía. Zulli es Magister en Ciencias Sociales, Licenciada en Relaciones del Trabajo de la UBA y se desempeña como gerente de sustentabilidad en Renault. Según sus palabras, el concepto de sostenibilidad se vincula con el triple impacto, el cual contempla no solo el aspecto económico, sino también lo social y lo ambiental.
“No se puede generar valor si no se analizan las externalidades. Ahí está el secreto, y en ese secreto está la construcción de largo plazo”, afirmó Zulli.
Los tres ejes de Grupo Mirgor
El Grupo Mirgor convocó a Zulli a profundizar sobre el triple impacto, un enfoque empresarial que mide el éxito de una organización no solo por su rentabilidad financiera, sino también por su impacto social y ambiental. Las organizaciones que adoptan este enfoque buscan lograr un equilibrio entre estos tres aspectos para crear un valor sostenible a largo plazo.
El impacto económico se refiere a la capacidad de generar beneficios financieros y económicos para la empresa o la organización, como el crecimiento en ventas, la generación de empleos y la rentabilidad financiera. La dimensión social apunta a la contribución que la empresa hace a la sociedad en términos de equidad, justicia social y calidad de vida, como la inclusión de empleados de diferentes orígenes, el respeto a los derechos humanos y la promoción de la diversidad. El tercer eje, el de la dimensión ambiental, está vinculado a la capacidad de la empresa para operar de manera sostenible en la reducción de su impacto ambiental, como la reducción de emisiones de gases de efecto invernadero, la gestión adecuada de residuos y el uso eficiente de recursos naturales.
Beneficios de una mirada sostenible
En el podcast de Mirgor, Zulli explicó que el concepto de triple impacto se originó en el “Informe Brundtland”, publicado en 1987 por la Comisión Mundial sobre el Medio Ambiente y el Desarrollo de las Naciones Unidas (CMMAD), cuya presidenta en ese entonces era la ex primera ministra de Noruega, Gro Harlem Brundtland. Según Zulli, el informe surgió debido a que Brundtland notó que muchos países del mundo estaban enfocados únicamente en lo económico, sin tener una visión a largo plazo.
Zulli defiende que la perspectiva sostenible siempre conlleva algún beneficio. Desde la perspectiva individual, se puede generar un impacto positivo en la organización o en la economía personal, afirma.
En ese sentido, sostiene que “los hábitos de consumo individuales son fundamentales ya que minimizar el impacto ambiental tiene un efecto positivo en la sociedad en su conjunto. Los intentos por disminuir el impacto ambiental también repercuten en el ámbito social. El secreto está en educar, la educación para la empleabilidad. La gente no quiere que se les regalen cosas, quieren que se les enseñe”, explica.